El pleno de la Comisión de Desembalse de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) ha aprobado este martes un desembalse de 1.200 hm³ para el riego en el Sistema de Regulación General (SRG) durante la campaña 2025, que se extenderá desde el 1 de mayo al 30 de septiembre. En función de las precipitaciones de los meses de septiembre y octubre, se podrá autorizar además un desembalse complementario de hasta 50 hm³ para completar el desarrollo de los cultivos de otoño durante el mes de octubre.
También se ha acordado una dotación del 91,6% de las concesiones para los cultivos con mayores asignaciones de agua, que tendrán así un máximo de 5.500 m³ por hectárea para una dotación de 6.000 m³/ha. Esto significa un aumento de 24,6 puntos porcentuales en las dotaciones respecto a las dotaciones máximas del año pasado, que fueron del 67%, lo que la convierte en la campaña de riego con mejores dotaciones desde 2017.
El resto de dotaciones del Sistema de Regulación General dispondrá de su dotación concesional o plena, Este Sistema de Regulación General está integrado por 350.000 hectáreas, que suponen más de 80% del regadío con aguas superficiales de la cuenca.
Para el riego del arroz se ha aprobado un volumen máximo a desembalsar de 363 hm³, correspondiente al 91,6% de su dotación máxima y que se incluye en el volumen total a desembalsar de 1.200 hm³, lo que se produce tras unos años difíciles en los que en 2022 se sembró sólo un 30%, en 2023 no se pudo cultivar por resultar incompatible la dotación autorizada con el cultivo y en 2024 se hizo en un 67%.
Asimismo, el pleno de la Comisión de Desembalse de la CHG ha autorizado 25 hm³ de agua para los riegos extraordinarios del olivar, resto de arboleda y otros cultivos.
En cuanto al abastecimiento, el presidente de la CHG, Joaquín Páez, ha destacado que los recursos para la población que depende de los embalses de la cuenca del Guadalquivir están garantizados como mínimo para más de tres años en todos los casos. Este organismo cuenta además con un plan alternativo al agua de los embalses, a través principalmente de captaciones en los ríos Guadalquivir y Genil y de pozos de emergencia, para ampliar aún más en el tiempo esta seguridad hídrica si hiciera falta.
Respecto al resto de los sistemas de explotación con regadío asociado, se han acordado dotaciones que oscilan desde los 750 m3/ha hasta los 5.700 m3/ha, dependiendo de los volúmenes almacenados en cada uno de ellos. Las zonas regables de la provincia de Granada son las que tienen mayores restricciones al no haber mejorado en la misma proporción la situación de las reservas hídricas en esos sistemas por falta de precipitaciones. De esta forma, se han autorizado dotaciones de:
- Sistema Guadiamar: 3.750 m3/ha.
- Sistema Rumblar: 5.000 m3/ha.
- Sierra Boyera: 3.500 m3/ha.
- Bembézar-Retortillo: 5.600 m3/ha.
- El Viar-El Pintado: 5.700 m3/ha.
- Guadalentín (La Bolera): 1.300 m3/ha.
- Guardal (San Clemente): 2.240 m3/ha.
- Hoya de Guadix: 2.250 m3/ha.
- Quéntar-Canales: 5.000 m3/ha.
- Bermejales: 3.200 m3/ha.
- Cubillas: 3.800 m3/ha.
- Colomera: 875 m3/ha.
- Guadalmellato: 5.700 m3/ha.
- Fresneda: 5.000 m3/ha.
En cuanto a la situación hidrológica actual, la cuenca está al 61% de su capacidad, con 4.911 hm³ de agua embalsados, lo que supone un incremento de 1.112 hm³ respecto al año pasado y se sitúa prácticamente en el mismo nivel que la media histórica de los últimos 25 años (60,6%). Por su parte, el Sistema de Regulación General almacena 2.922 hm³, el 51,7% de su capacidad, 610 hm³ más que en 2024 por estas mismas fechas, aunque con un déficit de 5 puntos porcentuales sobre el promedio histórico (56,6%).
Joaquín Páez ha subrayado que se trata de unas dotaciones bastante buenas, "que se merecían por fin los usuarios y el sector agrícola del Guadalquivir después de años difíciles", aunque se sigue en sequía, en situación de Prealerta en el Sistema de Regulación General. Desde la Confederación se ha hecho así durante el pleno un llamamiento a un uso eficiente de los recursos por parte de los regantes.