Nueva victoria del Marchena en un duro partido en Badolatosa

0-1 gracias a un solitario gol de Manu G.

El Marchena Balompié lo ha vuelto a hacer. Undécima victoria consecutiva, esta vez en un campo complicado como el de Badolatosa, donde se impuso por la mínima (0-1) en un partido trabado, sin demasiado brillo, pero con el carácter de un equipo que sabe sufrir y ganar.

El encuentro comenzó con un Marchena que asumió el control del balón desde el primer minuto, ante un Badolatosa que planteó un partido serio, cediendo la iniciativa pero muy ordenado atrás. La primera mitad se jugó prácticamente al ritmo que querían los locales: poco ritmo, mucha disputa y sin apenas ocasiones claras para ninguno de los dos equipos. Apenas dos llegadas aisladas del Marchena rompieron la monotonía de un primer tiempo que terminó sin goles.

En la segunda parte, el guion cambió ligeramente. El Marchena salió con más chispa, con más movilidad y con una intención clara de ir a por el partido. Los minutos pasaban, el Badolatosa comenzaba a conformarse con el empate y fue entonces cuando llegó la jugada clave: un balón sin aparente peligro dentro del área es mal despejado por un defensa, Álex, muy atento, mete el pie justo antes del segundo despeje y provoca un penalti que Manu convierte en el minuto 66. 0-1 y locura entre los jugadores y la afición desplazada.

Con el marcador en contra, el Badolatosa se volcó, colgó balones y buscó el empate con más corazón que fútbol. Pero ahí volvió a aparecer la seguridad defensiva del Marchena. González y Alberto estuvieron imperiales en cada duelo aéreo y el equipo supo cerrar el partido con oficio, seriedad y unión.

Una victoria más, tres puntos más, y una sensación de equipo sólido que ilusiona. Mención aparte merece la afición, que una vez más no falló y estuvo animando como si jugáramos en casa.

El próximo partido llega uno de los partidos más importantes del año: el Marchena recibe al líder, el San Marcos en el Mariano Pulido. Último partido en casa y mucho en juego. Desde el club hacen un llamamiento a toda la afición: el equipo os necesita más que nunca. ¡A llenar el estadio y a seguir soñando!